Capitulo 23

*Narra Alex*

Recogí todas mis cosas lo más rápido que pude, las metí todas apretujas en mi maleta y baje al primer piso, observando como los jugadores del Orfeo empezaban a entrar por la puerta principal, un poco mojados por la lluvia que había empezado a caer.

- Alex, ¿De verdad piensas irte? - pregunto Gigi al verme, acercándose lentamente a mí.

- ¡¡No te vayas!! - grito Angelo mientras se abrazaba a mi pierna - Quédate con nosotros.

- No - contesté con firmeza, cogiendo con fuerza mi maleta - Sois buenos, podréis ganar sin mí.

Tras decir aquello solté al rubio de mi pierna y me acerque a la puerta, suspirando interiormente al ver que la lluvia no había cesado ni un poco.

- Será mejor que te quedes aquí de momento - dijo Paolo mientras me miraba - Si sales con esta lluvia te va a dar una pulmonía.

- No me importa mojarme - conteste mientras salia de allí y empezaba a caminar hacia donde fuese que me llevase el camino que iba siguiendo. 

*Narración normal* 

- Bien hecho Paolo - dijo Gianluca con ironía

- Pero si esta vez no hice nada - suspiro Paolo mientras cogía un paraguas - Enseguida regreso...

- Procura que sea con Alex - pidió Gigi, el portero mientras lo miraba.

- Sí - suspiro Paolo mientras salía de allí.

*Narra Alex*

Seguí andando un largo rato sin rumbo fijo, no tenia a donde ir ni donde resguardarme de la lluvia, cuando me quise dar cuenta me encontraba en el área estadounidense. Al girar en una esquina me escondí rápidamente, a unos pocos metros de allí habían dos personas bajo paraguas. Reconocí rápidamente al chico, era Ichinose...pero no sabia quien era la chica junto a él...

Vi como él la abrazaba, aun que me cueste admitirlo se veían realmente bien juntos, supongo que ya se conocían desde antes, seguramente hasta eran pareja. Supongo que lo mío fue un amor platónico realmente corto... Sin darme cuenta empece a llorar, fue entonces cuando sentí como alguien tocaba levemente mi hombro.

- M.D - susurre mientras miraba a mi lado y miraba al hombre rubio a mi lado, el cual me tapo con su paraguas negro.

- ¿Al final has decidido marcharte? - preguntó él mientras miraba a la pareja, que se marchaba ya.

- Siento no poder cumplir sus expectativas... - dije mientras bajaba un poco la mirada - Al fin y al cabo no soy tan buena jugadora como creía...

- En realidad eres una gran jugadora, lo que pasa es que se te ha nublado la vista por culpa de un simple mal entendido - me dijo M.D mientras me miraba.

- Quizás... tienes razón - susurré en voz baja, aun que lo suficientemente alto para que me escuchara.

- Bueno, haz lo que creas mejor para ti - dijo mi ex-entrenador mientras se marchaba de allí, dejando que la lluvia volviese a caerme encima.

Seguí con mi camino hacia algún lugar indefinido mientras dejaba que las gotas de lluvia se mezclaran con mis lagrimas.

- ¿Alexandra? - pregunto un alguien detrás de mí, pude reconocer al instante esa voz, era Shawn - ¿Qué haces aquí?

- Podría hacerte la misma pregunta - dije mientras me paraba y me giraba a mirarlo.

- ¿Por qué estás llorando? - preguntó él.

- No lloro, es la lluvia - suspiré.

- ¿Por eso tienes lo ojos rojos? - preguntó.

- Que es lluvia - suspiré. 

-  Aja, y yo soy Peter Pan - dijo Shawn cogiendo suavemente mi mano y girándome hacia un portal, en el cual entramos para refugiarnos de la lluvia.

- Enserio no es nada, me caí mientras corría - mintió Alex mientras miraba hacia otro lado

- Yo también use mucho esa excusa - suspiro el albino mientras acariciaba con cuidado la mejilla de la pelirroja - Puedes contármelo, somos amigos...

- Lo sé... Pero ahora me tengo que ir - dijo la chica mientras tragaba saliva.

- ¿A donde? - preguntó él, mirándola con confusión.

- A casa, voy a dejar el torneo, fue un gusto conocerte - dijo ella mientras salia de el portal y empezaba a correr rápidamente.

*Narra Alex*

Seguí corriendo mientras sacaba mi teléfono del bolsillo, importándome poco que se mojara. Marque un número y espere a que ella contestara.

- ¿Qué pasa? - pregunto la voz de mi mejor amiga desde el otro lado de la línea.

- Soy yo - dije mientras intentaba que no se notara que iba corriendo - Necesito que me consigas un billete para regresar a casa, ya. 

- ¿A qué viene esa exigencia así de repente? - preguntó, con eso ya tenía claro que me iba a decir que no.

- Mira, tienes dos opciones, o me consigues ese billete ya o le diré a tu padre que te gastaste todo el dinero de la tarjeta de crédito principal - amenacé.

- ¿En primera clase o turista? - preguntó ella mientras cambiaba de línea.

Pasaron unos segundos hasta que finalmente pare al ver a lo lejos a Paolo, frente al aeropuerto con un paraguas. Me acerque a él y pase de largo, pero me detuvo, cogiéndome de la muñeca.

- Vamos, los demás están preocupados por ti - dijo él, mirándome.

- No puedo, me tengo que ir - dije intentando soltarme del agarre.

- No puedes irte, aún no ha acabado el fútbol frontier internacional - dijo Paolo - Vamos, nos esperan.

- Mira Paolo, tienes un gran equipo, a mí no me necesitas para nada - dije mientras fruncía un poco el ceño - Así que deja de tratarme como amiga, solo quiero irme.

Tras decir aquello me solté de su agarre y entre, encontrando allí a Lucí, la cual me esperaba con dos billetes en su mano derecha, mirando hacia el techo, el cual era de cristal y se podía ver como las gotas caían sobre el vidrio.

- El cielo llora - murmuró ella mientras me daba el billete - No quiere que te marches.

- Que llore todo lo que quiera, la decisión esta tomada - dije mientras me dirigía hacia las escaleras mecánicas.


Fin.  


Holo, bueno, como dije, este es el último capítulo de esta historia, no se sulfuren por que acabe así, como también dije que tenía segunda temporada, está programado que el primer capítulo se suba el 29/12/2016.

Espero que lo lean y lo apoyen tanto como a esta novela, gracias por leer y seguir mi fanfic. Un beso y hasta pronto.

Att: Canimedes-chan

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