Capitulo 15

Después de varios besos, me separo de él por falta de aire y a los segundos el vuelve a atraer mis labios a los suyos para morderlos.


Me siento incómoda. Mucho. Pero tengo que aguantarme todo esto. Tengo que olvidar al imbécil de Diego. Eso es lo quiero. No vale la pena estar detrás de él.


-Me gustas mucho, Martina. -Dijo Dylan y ¿qué se supone que debía hacer? ¿Mentir? No sé en qué me estoy metiendo.


-Tú también me gustas mucho. -Dije sonriéndole. Me sentía fatal.


-¿Por qué no me besaste el día de la fiesta?


-Pues, no sé, no estaba preparada... Íbamos demasiado rápido.


-Tranquila. No te presionaré. -Dijo y me dio un beso en la frente. Me sentía fatal, yo lo estaba usando.


¡Qué estúpida eres Martina! Sales de un problema para meterte en otro. Aunque pensándolo bien, prefiero meterme en miles de problemas más con tal de salir de ese problema que tanto me lastima.Diego.


Dylan me dejó en mi casa sin antes darme un beso de despedida y decirme que vendría por mí para llevarme a la escuela en la mañana. Le sonreí y le dije que me parecía una idea genial.


Una idea genial como olvidar a Diego que sería lo mejor que me podría pasar.


-¿Que tú estás haciendo qué? -Pregunto mi amiga Mechi por teléfono mientras estaba acostada en mi cama.


-Dylan es apuesto, de alguna manera u otra me ayudará a olvidar a Diego.


-Es que no puedes ser tan estúpida Martina. Tú estás enamorada de Diego, ningún chico apuesto que se te aparezca te hará olvidarlo.


Es que tú no entiendes. Diego no es bueno para mí. 1. Mi hermano lo mataría si alguna vez pasa algo entre nosotros, ¡ni siquiera le habla por los rumores que son completamente falsos! 2. Él es un maldito mujeriego y verlo con cada chica que se le aparezca me duele muchísimo. 3. Somos muy diferentes. Él le gusta salir, las fiestas, es extrovertido y divertido. Yo soy todo lo contrario. Sería demasiado aburrida para él. 4. No se fijaría en mí, nunca. Tendría que pasar el resto de mis días viendo como el anda con chicas diferentes y yo sufro.


-Los opuestos se atraen. -Dijo Mechi con la esperanza de que pasara algo entre los dos.


-¡Joder, Mercedes! Somos humanos, no imanes.


-Como sea. Lo que haces está mal. Estarás con una persona que no quieres, lo cual te lastimará más. Así nunca vas a olvidar a Diego.


-Odio a Diego, lo odio. ¿Por qué tiene que ser tan importante Mechi? -Dije entrecortada.


-Mueres por ese chico Martina, por mucho que intentes negarlo.


-Gracias por tu ayuda, eh. Así lo olvidaré más rápido. -Ella rio- A veces me gustaría tener una relación como la tuya amiga.


Y así seguimos hablando hasta que me despedí e hice el intento de dormir. Vueltas y vueltas por la cama, por la misma razón de todos estos años... Diego.


Me había hecho una coleta y me había puesto mi suéter favorito, con un jean negro ajustado. Estaba comiendo una manzana y mi hermano bajó. Todos estos días ha estado distante porque le mentí y los rumores no ayudaban mucho. Mi hermano era tan irritante y sobre protector. A veces no lo soporto, pero ese chico es muy importante para mí.


-Buenos días. -Dijo intentando sonreír pero le salió como una mueca


- Vamos, se nos hará tarde.


-Oh, no me voy contigo hoy.


-¿Caminarás? Vamos Martina, sabes que siempre nos vamos juntos.


-Un amigo me llevara a la escuela. -Genial, lo que me faltaba. Ahora quién aguanta su sermón.


-¿Quién? -Dijo el quitándome mi manzana y dándole un mordisco.


-No te enojes. -El asintió- Dylan...


-¿Podrías parar? Primero te metes con él, luego con mi mejor amigo, luego con él... A veces empiezo a creer que lo que dicen de ti es verdad. -No puede ser más imbécil porque no se puede.


-Eres demasiado estúpido. Perdón que te lo diga, pero ya estás demasiado grande como para creer en rumores.


-¡Estaba a punto de hablar contigo hoy y arreglar todo esto! Pero lo arruinas, como todo.


-¿Arreglar qué, Francisco? No tenemos absolutamente nada que arreglar. Vos haces tu vida y yo la mía.


-Cuando salgas llorando ni siquiera me busques. Te pudrirás en tu tristeza. -Eso me había dolido tanto. Francisco nunca cambiará, siempre será ese chico impulsivo que dirá lo primero que se le venga a la cabeza cuando tiene rabia. Él sabía que me había dolido, lo sabía perfectamente.


-Me da asco vivir en la misma casa contigo. -Dije. Él era duro conmigo, yo también podría serlo.


-¡Vete entonces Martina! ¡Vete! Nadie te obliga a vivir aquí.


-Después de que analices todas las cosas que me dijiste, no me pidas perdón. Eres un maldito impulsivo, nunca cambias.


-No te tengo que pedir perdón por nada, dije toda la verdad y no me arrepiento. Y ya llegó ese imbécil por ti. Vete. -Dijo Francisco.


-Extraño al Francisco de antes, este en serio que es un asco. -Dije y me fui, no quería escuchar más las estupideces que decía cuando estaba furioso.


Salí y mi subí al carro de Dylan. Él me dio un corto beso en los labios. No sé dónde voy a llegar con esto, no sé. Llegamos a la escuela y él se bajó primero para abrirme la puerta. Sonreí y le agradecí, entramos a la escuela y me fui directo a mi casillero, saqué mis libros y él seguía a mi lado.


-Me tengo que ir a clases. Nos vemos después preciosa. -Dijo y me besó. Lo vi desaparecer entre las personas.


-Eres lo peor amiga, lo juro. -Dijo Mechi acercándose a mí


- ¿Es que en serio de donde sacaste esa idea? ¿Yahoo Answers? -Yo doblé los ojos y ella rio.
Nos dirigíamos a nuestra clase y lo vi.
Mirándome. Se veía cansado, como si no hubiera dormido toda la noche y su cabello estaba despeinado. Seguía viéndose igual de sexy. Me pregunto si le pasó algo. Aunque sé que Diego es un chico fuerte.


Me saqué esas ideas de la cabeza y entramos a nuestro salón.


-¿Lo viste? Se veía algo cansado... -Le dije a mi amiga.


-Ay Martina, yo lo vi igual a todos los días. -Reí.
---------------------------------------------
Diego.


Cuando vi esa escena, mi plan se fue a la mierda. Con tan sólo verlo besarla, la pequeña esperanza que tenía se fue. Se hizo completa mierda. Llevarla a mi lugar favorito y confesarle todo. Ya tenía todo arreglado. Mi madre es amante de esas cosas románticas y todas esas mierdas, se emocionó mucho cuando la llamé a contarle. Dijo que ella misma prepararía la comida y decoraría el lugar, yo sólo la escuchaba y asentía. Ella estaba tan feliz de que por fin mostrara interés en una chica, pues ella siempre me ha querido ver en una relación. Empezó a decir que se llevaría tan bien con ella que serían como mejores amigas. Dijo tantas cosas que me hacían reír. Mi madre estaba un poco loca, pero yo amaba a esa mujer.


Mi día terminó siendo muy diferente. No podía estar en esa puta escuela más. Me fui a casa y caí en un profundo sueño, con tal de olvidarme de todo.


Me levanté como a las cinco de la tarde y me puse a tocar la guitarra y escribir alguna que otra canción, necesitaba desahogarme. Había recibido un mensaje de mi madre.


"Ya está todo listo. Le va a encantar. Te amo mi bebé." Sonreí. "No importa que tan grande estés, tú siempre serás mi bebé." Ella siempre dice eso. Y me doy cuenta de que ella es la única mujer que tengo en mi vida.


Me cambié y me dirigí a donde según yo, hoy las cosas cambiarían completamente. Esa casa donde la llevé el día de la fiesta, donde hablamos un poco y donde se quedó dormida. Donde la cargué en mis brazos, la subí con cuidado a la camioneta que tenía mi padre allá y la lleve a casa.


Llegué y no pude evitar sonreír. Mi madre definitivamente está loca. ¡Puso velas, joder! Reí. Había una mesa en todo el jardín, sólo para dos. La comida se veía deliciosa pero no tenía hambre.


Suspiré. Imaginé como hubiera sido todo si hubiera salido a mi manera. Hubiéramos hablado de tantas cosas e incluso hubiera podido saber si ella me quiere como yo la quiero. Hubiéramos podido empezar algo. Pero las cosas nunca salen a mi manera, por mucho que lo intente.


Se me escapa una lágrima y me maldigo, ¿desde cuándo lloro por alguien? Y la respuesta es tan simple. Desde que esa maldita niña con sonrisa perfecta entró a mi vida.


Me quedo sentado pensando en todo. En ella. Me maldigo de nuevo. Mi celular empieza a vibrar y es un mensaje de texto. Mi mamá.


"Dime que ha funcionado. :D" Me seco la lágrima que cae por mi mejilla y respondo.


"Sí mamá, todo ha salido perfecto." Mentí.

Comment