Tartalo: es un gigante de un solo ojo rojo en la frente que se come a los niños y cuida el ganado de ovejas que tiene. También come ovejas de su ganado y vive en las rocas y las cavernas. Tiene una fuerza sobrenatural y largos colmillos afilados. Viste de pieles de ovejas, abarcas y tiene un bastón. 

Basajaun: es un gigante con una fuerza sobrehumana y pelos por todo el cuerpo. Es el señor del bosque y cuida de los animales, avisa a los pastores cuando hay tormenta o lobos para que se retiren ellos y el rebaño. De él aprendieron los humanos a hacer la sierra, a hacer el pan y el queso y las cuajadas y a hilar. Su pelo es naranja y está desnudo ya que está cubierto de pelo. Vive en cuevas.

Basandere: es la mujer del Basajaun, cuida del bosque y los animales. Está desnuda y tiene el pelo verde adornado con flores y es la señora de los bosques y habita en cuevas como bosques y selvas como las de Irati. Enseño a los humanos a cuidar de los animales en la ganadería y a cultivar árboles frutales, frutas, verduras y hortalizas en la agricultura.

Los jentiles: son gigantes con una fuerza sobrehumana que viven bajo castros y dólmenes escondidos. Cuando llegó el cristianismo desaparecieron escondiéndose bajo castros y dólmenes. Construyeron castros y megalíticos.

Erroldan: es un gigante con una gran fuerza sobrenatural. Tiene largos cabellos rubios y ojos verdes. Era del ejército francés del emperador de los francos que era Carlomagno. Venció a los vascones conquistando el País Vasco y Navarra. Pero los nobles navarros lo envenenaron derrotando así al ejército de los francos que más tarde expulsaron formando el Reino de Navarra. 

Maides: son gigantes de los que los humanos aprendieron a labrar y a sembrar la tierra. Tienen una fuerza sobrenatural. Formaron castillos y dólmenes con piedras en los que viven debajo de ellos cuando los cristianos les perseguían. 

Mairus: son las mujeres de los jentiles. Enseñaron a los humanos la orfebrería y a coser y a tejer. Son muy fuertes. Tienen largas melenas negras y ojos marrones. Tienen una fuerza sobrenatural.