Las sombras de las piedras en el colchón de flores doradas confundía a ambos hermanos. Las rocas luminosas empezaron a iluminar el centro de un largo pasillo que llevaba a una especia de puerta.  Los hermanos avanzaron y vieron hacia adentro. Una luz del techo alumbraba una parte de un pasillo, y atrás se podía divisar un arco de tonalidades violeta con toques similares a los de un castillo modermo. Ambos hermanos, sin decir palabras, se miraron. El menor, más curioso y valeroso, avanzó hacia el círculo de luz. Desde allí, una flor dorada salió del suelo. Esta miró a Henry con sus ojos, asustando al rubio, quien dio un paso atrás. La flor le miró confundida. Zet se acercó y vio a la flor.

-¡Howdy, soy Flowy, Flowy la Flor. Un gusto conoceros a ambos.-la flor miró a ambos chicos. Se le formó una risa en el rostro, pero al ver la reacción de los dos en frente suya, rió a carcajadas. Ambos chicos se habían caído. Al suelo.

-E-esa flor...- dijo Zet, apuntando con su dedo a la flor de petalos amarillos

-¿Habló?- preguntó Henry

Ambos se miraron y gritaron. Su rostro demostraba sorpresa más que terror o miedo después de gritar.

-Eh, niños, ¿de que hablan tanto?- preguntó la flor. Zet se levantó y la vio con alegría.

-Había escuchado rumores de las flores ecos, pero no sabía que eran amarillas- Zet se acercó a la peculiar flor para tocarla. Ésta, al notar que el peliblanco lo quería tocar, cambió su rostro amable y gentil a uno malévolo.

-Alejate, inmundo humano, ¿Acaso no sabes las reglas de acá?-y sin precio aviso, atacó con sus pétalos hacia Zet, quien esquivó apenas ante el rápido ataque de Flowey- En este mundo, es matar, o morir- y sin más, quiso atacar nuevamente a Zet, pero Henry se interpuso con su mochila usándola como escudo. Flowey logró destrozar la mochila. Estos ataques, incesantes, seguían y seguían. Ambos hermanos esquivaban hasta que la pequeña flor los arrincobó. Ésta empezó a reír, lanzando un ataque con sus pétalos. Los hermanos cerraron los ojos pensando lo peor, pero un sonido a chispas en el aire y el olor a fuego se exparsio por el ambiente.