Vos.

Fue mi decisión. Pero vos ya no estás.
Sé que tengo cosas que resolver. Pero yo te quería a vos conmigo, y eso nunca fue una duda para mí.
Las horas pasan, hago lo imposible para no pensarte, pero me haces mucha falta.
No siento la necesidad de que lo sepas, no te voy a ir a buscar, no te lo voy a hacer saber. Sé que te lastimé y no quiero hacerlo mas, quiero que sanes.
Pero las horas pasan y faltas vos. Tu risa, tus chistes, tu mano con la mía, tu alegría, tu piel, tu sexo, tu cuidado, tu caminar cansado.
Faltas vos. Vos esperándome en la puerta de mi casa, siempre con un abrazo y un beso rico. faltas vos en mis noches de verano, tomando mates hasta morirnos de sueño, jugando a las cartas, dándome unos buenos besos (siempre ricos).
Faltas todo vos. Toda esa otra parte de vos que no prefiero ni pensar, la que me dolía, la que siempre me pinchaba un poquito el corazón. Pero a esa parte no la extraño. A veces prefiero ni recordarla para seguir teniendo esos otros recuerdos hermosos tuyos (error, lo sé).
Me va a hacer falta todo lo que proyectamos juntos, toda la ilusión de lo que deseábamos, pero siempre juntos.
Hoy no tengo ganas de nada. Quiero volver a estar tirada con vos en la cama, vos insistiéndome para que me levante, para que compartamos unos mates (Calientes si los hacía yo. Siempre te quemabas, siempre te retaba y nos reíamos, me abrazabas), yo con ganas de seguir ahí, mirándote con cara de dormido, un ratito más, apreciarte, apreciar la intimidad que logramos juntos, apreciar el afecto de compartir una cama con alguien. Compartir una cama con alguien con amor.
"Y la mañana, amanecemos todos pegados, entre remolinos de besos y calma, que espera la primavera, hasta que empiecen a ser como querías, los días."
Te extraño. Te pienso, todos los días. Me haces falta vos.