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- supongo que tenemos que llevar al tipo que ha matado al hijo de la muerte blanca. - dice Tangerine y voltea a verme. - descuida, obviamente no eres tú de quien hablo, sino del tonto sujeto de anteojos.

- ya te lo he dicho, el no fue el culpable. - Lemon pone los ojos en blanco. - no me parece correcto que el salga perdiendo solo porque no podemos encontrar al responsable.

- wow, al menos alguno de los dos tiene sentido común y un corazón. - dije en voz baja pero claramente, los dos me escucharon. Tangerine se mostró más serio que nunca, espero no haber herido sus sentimientos. Bueno, si es que tiene algunos.

- ¿te gustan tus brazos? - le pregunta a su hermano.

- sabes que es así. -Los miré con el ceño fruncido. - adoro mis brazos de la misma manera que tú los tuyos.

- entonces tiene que haber un culpable. Y mientras no lo tengamos, el suena como la mejor opción. - en ese momento, un celular empieza a sonar. Chequé si era el mío pero no, por ende, de alguno de ellos dos.

- ¿es el tuyo? - se preguntan literal al mismo tiempo y me hace dudar mas si son gemelos o si tan solo están muy conectados.

- se llevó mi celular y mi arma Lucille ¿puedes creerlo? - Lemon me pregunta. - era mi favorita.

- lamento mucho lo de tu arma. - dije levantando ambos hombros. - ¿hay algo en lo que pueda ayudarles?

- solo guarda silencio, que voy a contestar la llamada. - asentí con la cabeza. - ¿qué pasa? - Tangerine dice al altavoz de su celular. - lo siento, no tenía a la mano mi celular pero aquí lo tengo y...

- bajan en la siguiente estación y con el maletín. - me asusté, no lo voy a negar. Estamos hablando de malas personas, no digo que estos dos no lo sean, pero al menos me agradan y yo a ellos y eso me asegura que no voy a morir, en cambio las personas con las que trabajan pueden llegar a tomarla contra segundas personas ajenas al problema. - no quiero escuchar excusas, van a hacer lo que el jefe manden y aparte, queremos asegurarnos de que su hijo también esté a salvo.

- pero aun no toca, es hasta como en cinco estaciones. Sabemos lo que hacemos, dejen de estar molestando porque tenemos esto bajo control.

- se bajan o ya saben que es lo qué pasa. - Tangerine cuelga el celular y lo miré asustada. ¿A caso está es la parte que por yo ser una entrometida en temas que no me involucran, iba a morir? No me parece ni lo Justo ni lo correcto. No cuando lo único que yo quería eran unas buenas vacaciones para que mis padres confiaran en mi. Y lo primero que hago es demostrarles lo contrario cuando estoy trabajando con dos asesinos solo porque uno me pareció lindo en un principio. Increíble como es que terminé aquí y peor aún, queriendo ayudarlos a lograr su objetivo.

- tendremos que hacer la marioneta. Con el sujeto tonto con los tatuajes en el rostro.- le dice a su hermano. - preciosa, amaría que bajes conmigo y me acompañarás con esos sujetos. ¿Podrías hacerlo?

- ¿sabes lo mal que suena eso? Jamás aceptaría. Aparte ¿para que me maten? No gracias. - negué varias veces con la cabeza. - no tienes el maletín, literalmente estarías comprobando que lo has perdido y me van a matar.

- no dejaríamos que algo malo te pase. - de nuevo, hablan al mismo solo. Pero si algo malo pasa, no es como si estuviera en sus manos, por ende, no pueden prometerme nada.

- mira, esto es lo que haremos. Voy a bajarme primero yo solo, y hablaré con ellos. Les diré que el maletín está adentro por seguridad y Lemon les mostrará a este idiota. - apuntó al chico muerto.

- ¿ahí donde entro yo? ¿Cómo puede ayudarte mi presencia?

- fácil, si deciden tomarla contra mi, tú llegas y me saludas con mucha emoción porque nos hemos conocido en este viaje y te gusté como era de esperarse que me buscaste y querías que regresara.

- es la idea más idiota que he escuchado en toda mi vida y eso que he escuchado demasiadas.

- de hecho, no es tan mala idea. - Lemon dice y voltee a verlo. - así un inocente es parte de la historia y no pueden hacer nada al respecto.

- si soy una inocente en la historia. No veo como fingiría eso. - dije y Tangerine se pone de pie para darme un beso en la mejilla.

- perfecto, me la legro que nos hayamos puesto de acuerdo. - se pone de pie y va hacia la salida del tren.

- quiero aclarar, que nunca lo he visto así se amable con nadie en toda su vida. Ni siquiera a mi me ha dado un abrazo en mucho tiempo. - me dice Lemon, y para evitarme el momento incómodo donde yo me sonrojo. Me puse de pie y por igual fui a la entrada para estar lista para mi señal.

Fue inevitable no mirarlo salir y notar lo guapo que lucía. Si de por si ya lo es, así con su camisa recién desabrochada y arremangado de las mangas. Encendiendo un cigarrillo mientras daba su famosa caminata luciendo... wow, no puedo creer que voy a decir esto pero bastante sexy. No pude evitar morder mi labio inferior mientras lo miraba pero al darme cuenta de aquello, de inmediato me detuve y mejor razonaba y prestaba atención a lo que pasaba para estar lista cuando llegue el momento.

- ¿vienes sin lo que te pedimos? Recuerda que nosotros te pedimos el maletín. - un sujeto asiático con bigote curioso y anteojos le pregunta. Venía con toda su pandilla.

- si pero soy profesional, obivmanete tengo que vigilar que todo este bien antes de arriesgar la situación ¿no les parece?

- ¿y Tangerine?

- yo soy Tangerine, Lemon esta ahí dentro con el niño y el maletín, - apunta a la ventana del expreso y en efecto, hicieron esa cosa extraña de usar el cuerpo como marioneta que no se si me causaba risa o nervio, o inclusive hasta miedo.

Esa era mi señal de salir.

- hey, hola. - salí corriendo con el corazón latiendo tan rápido como nunca, más que nada por los nervios. - pensé que te había perdido... no te encontré en donde estabas sentado.

- ¿me estabas buscando? - el me pregunta sonriendo, supongo que es parte de la historia así que asentí con la cabeza. - chicos, ella es una amiga.

- nos acabamos de conocer aquí en el tren bala. - dije tomando de su mano. - ¿podemos regresar? Quisiera seguir... - me inventé otra tontería. - enseñándote fotos de... mis gatos.

Todos me miran con el ceño fruncido, confundidos, quizás un poco extrañados de lo que acaban de decir, inclusive Tangerine.

- por supuesto. - y lo siguiente que hace, no me lo esperaba para nada. Me toma de las mejillas y acerca mi rostro al suyo para besarme. Mentiría si digo que no lo disfruté, que no casi me derrito de amor ante el contacto de sus labios con los míos y de sus manos sobre mi rostro sutilmente para hacer de la suya y estar besándome. El termina el beso de la manera más rápida y lo normal sería que yo molesta, le de un golpe por tal atrevimiento sin mi consentimiento pero estaba actuando y esto quedaba Perfecto con la situación.

- ¿regresamos? - pregunté.

- me tengo que ir pero... fue bueno verlos. - me toma de la mano y llegamos Justo a tiempo antes de que las puertas se cerraran. - y... dejen de meterse conmigo.

Las puertas se cierran.

- ¿se logró? ¿Se la creyeron toda? - le pregunté y este asiente con la cabeza, algo aliviado. - ¡Perfecto! - sonreí y luego le di una cachetada.

- eres la persona más bipolar que he conocido en mi vida y eso que he conocido varías. ¿Por qué fue ese golpe si se puede saber?

- no recuerdo que estuviera en el guión de esta mini actuación el que me besaras.

- ¿te gustó? - me pregunta con su sonrisa coqueta mientras se acerca más a mi pero le doy una segunda cachetada. - no estoy siendo el más grande fan de esta dinámica entre nosotros.

- al menos ya nos hemos librado de esos pesados, se veía que si te miraban sin el maletín te hubieran matado. - suspiré hondo. - me alegra de que te encuentres bien, como quiera.

- Gracias.

- ahora... ¿ahora que sigue? - me recargué en la puerta de la entrada. - ¿qué podemos hacer para seguir buscándolo?

- separarnos de nuevo. - hace una mueca. - ¿deseas esta vez con Lemon? Puede y que sean un mejor trabajo en equipo.

- puede que si.

- aunque me gusta tenerte a mi lado. - dice acariciando mi hombro. - no somos el mejor dúo dinámico pero me hacer sentir más tranquilo.

- entonces... voy contigo. - de nuevo sonríe. - claro, disfrútalo. Ahora, vayamos ¿si? Lemon esta solo. - me detiene tomando de mi mano.

- lamento haber... - cierra los ojos y los aprieta, como si lo que estuviera por decir, le pesara. - lamento haber hecho sin que tú así lo quisieras.

- disculpa aceptada. - esta vez yo soy la que sonrió y me volteo para irnos de regreso. - andando que no tenemos mucho tiempo.

- para una persona sin una parada fija, tienes mucha iniciativa en esta situación.

- si bueno, es lo qué hay y es más entretenido que quedarme leyendo mientras ustedes y otro asesino están sueltos en el tren bala.

- ¿y bien? ¿Cómo les fue? - Lemon nos pregunta pero de la nada, empieza a sonreír. - me imagino que de maravilla.

- ¿por qué lo dices? - decimos los dos al mismo tiempo y este se inclina para limpiar del labio de si hermano con su pulgar.

- un poco de brillo labial, nada más. Pero ya quedaste limpio. - Lemon dice conteniendo las ganas de reírse y yo incómoda e inclusive apenada, tan solo me quedo mirando a la ventanilla para evitar el contacto visual. - okay entonces... ¿ya no nos molestarán?

- al menos no por ahora, no. - aclara Tangerine. - ahora, regresamos a nuestro primer objetivo que es el sujeto con anteojos y gorro tan terrible.

- que ya no los tiene porque, recuerda que se los entregó al sujeto que quería un trío.

- ¿qué tanto ha pasado entre ustedes que me perdí mientras estaba noqueado? - Lemon de Nuevo se ríe. - ¿un trío? ¿En serio?

- ¡no fuimos parte de eso! - aclaré. - pero al parecer alguien lo quería.

- chistoso.

- muy bien, regresamos ahora si. -Tangerine dice y le prestamos atención para saber ahora si que hacer.

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