Mismo día.

Narra Lucille.

─¿Dixon? ─Pregunto extendiendo su brazo con mi foto entre sus grandes dedos, asentí levemente mientras daba un par de pasos en su dirección para tomar aquel papel, pude notar me observaba de forma extraña y eso me inquietaba demasiado. ─Se quien es ese sujeto ─Señalo la fotografía que tenia ahora entre mis manos, las ansias al oír aquello comenzaron a consumirme mientras temía lo peor, que estuviese muerto, algo me decía que lo estaba.

─¿Quien? ─Pregunte en un susurro con impaciencia relamiendo mis labios a la espera de una respuesta valida, no como la respuesta tan expresiva que Carol me había dado. Entrecerré mis ojos con ira al recordar lo que había pasado.

─¿Te doy una pista? ─Sugirió el hombre volviendo a entrecerrar sus ojos de un color turquesa apenas visible.

─No me dan afán los acertijos ─Cruce los brazos sobre mi pecho e incline mi cabeza hacia un lado, aquella conversación no me estaba dando frutos y debía hacérselo saber.

─Hola Emeline Kate, ha pasado un largo tiempo ─Comento él a lo que abrí mis ojos como platos mientras arrugaba la frente confusa, así era como solían llamarme antes de que este mundo del diablo comenzara y podía jurar no lo había mencionado nadie de aquí por lo que solo quedaba una forma valida de que lo supiese. Comencé a negar con mi cabeza casi atragantandome con la saliva mientras mis pies se enfriaban a causa de los nervios.

─¿Donde esta Merle? ─Pregunte apenas algo se me vino a la cabeza con un nudo en la garganta, pero no con intenciones de llorar sino por que estaba demasiado nerviosa como para hablar demasiado, ¿Acaso Daryl podía ser...?

─El... ─Comenzó a decir con voz ronca y luego de un momento bajo su cabeza, sabia lo que significaba, mi padre real no estaba muerto pero la persona que había tomado su lugar todos estos años si lo estaba.

─Oh..., okey ─Dije con tal naturalidad que asustaba, levante mi vista al percatarme de que estaba observando el suelo. ─Volveré a mi rincón ─Señale una esquina alejada en la que me había acomodado ayer por la tarde, acababa de recibir una noticia un poco muy difícil de procesar en medio de un apocalipsis, era mejor si tan solo no le daba importancia y dejaba que todo fluyese de forma natural.

─Lucille ─Llamo una voz a mis espaldas cuando intentaba acomodarme nuevamente en el suelo, al levantar mi vista el adolescente de cabellos dorados que estaba de pie frente a mi prosiguió a acuclillarse ¿Y ahora que era lo que quería?¿También pensaba golpearme? Estúpida Carol, hacia que desconfiase de todos allí. ─Oye tu... ¿Me ayudarías con algo? ─Imploro el joven chico mirándome.

─No hago favores ─Negué alzando mis hombros y pintando en mi rostro una mueca de decepción a lo que el se acerco de repente puso ambas manos en mis hombros presionándolos en función a la pared detrás de mi.

─Tu sabes manipular armas y matar gente de forma silenciosa ¿no? yo no te considero una asesina por eso ─Con un tono sigiloso y amenazante acerco sus labios a mi oreja, asentí levemente mientras deslizaba mi mano asta llegar a su cuello donde hice presión en uno de los nervios de su cuello que lo dejarían inmóvil por varios segundos a causa del dolor, dándome la ventaja de sacarle de encima, y así fue, pronto el chico callo al suelo gimiendo y tomándose el cogote. ─Hija de perra, Carl Grimes, el chico sin un ojo, si no lo matas tu primero terminara por hacerlo el a ti, solo quería ayudar ─Dijo con dificultad ante su audiencia de pocas personas.

─Es una pena que ose a intentarlo... y oh, si vuelves a poner tu mano cerca de mi otra ves haré que tu espina dorsal se salga de tu espalda ¿oíste? ─Amenace y comencé a alejarme cuando me detuve para volver a voltearme. ─Y mi madre no era una perra ─Aclare con una sonrisa triunfal en el rostro y por fin me aleje de allí pensando que aquello que había dicho... tal ves era cierto, el chico sin ojo se había mostrado indiferente y contradictorio conmigo, no iba a extrañarme que intentase levantar fuego en mi contra pero debía demostrarle que para que eso sucediera debería hacerse la idea de que perdería el otro ojo. Sin esperar mucho tiempo mas me dirigí a donde se encontraba Rick pero esta ves me mantuve a su lado sin hablar hasta que él se decidió a emitir palabra.

─¿Estas bien?─Pregunto clavando sus ojos en mi para luego agrega. ─Quiero oír tu versión de lo que sucedió con Carol.

─Habrá tiempo para eso Rick, ahora debemos planear algo para sacar a todos los caminantes restantes de Alexandria─Comente señalando con mi dedo pulgar en direccion a la puerta que seguía siendo rasguñada por las criaturas que ahora estaban en estado putrefacto. ─Aun me quedan tres bengalas pero mi pistola esta perdida allí fuera- volví a señalar con mi cabeza la puerta.

─¿Crees que puedes encontrarla?─Cuestiono él tomando delicadamente mi brazo con el único fin de apartarme del resto. 

─Por supuesto que si, solo es cuestión de rastrillar un poco el lugar, no puede estar tan lejos─Me encogí de hombros, no me quedaban dudas de que esta gente me necesitaba y mucho, Rick no parecía ni la mitad de líder de lo que Daryl había descrito sobre el.

─Daryl puede ir por ella...─Sugirió el hombre de los cabellos color azabache pero le detuve posando mi mano extendida frente a su rostro y cerré suavemente mis ojos con un gesto de aturdimiento, hablaba demasiado rápido, como si el mismo estuviese abrumado.

─Yo iré, pero necesito a los mejores tiradores Rick─Espete remarcando aquellas palabras, era mi plan, estaba poniendo mi cerebro y mi cuerpo en juego, no iba a arriesgarme a perder la vida tan fácilmente y dejar a Dwight solo en esto.

─Necesitamos a Maggie, Glenn, Sasha y Abraham, ellos podrían ayudarte si los encontramos a tiempo ─Dijo él con melancolía y dude sobre mencionar a la persona que había divisada trepando uno de los arboles del exterior de la valla, decidí no hacerlo ya que probablemente en en aquel momento ya era un caminante mas, tampoco iba a decirle lo del pelirrojo por que probablemente era uno de los que había nombrado recientemente, esperaría mejor a encontrar una buena excusa o me guardaría su muerte para mi.

─No hay tiempo de buscar personas, Rick, tenemos que hacerlo ahora y quiero a los mejores tiradores que tengas aquí cubriéndome, los mejores ─Volví a recalcar y continué ─. Cuando tenga la pistola disparare una bengala hacia el oeste─Señale el extremo contrario a la entrada de la zona segura Alexandria. ─Y eso les dará unos segundos para abrir las rejas y esconderse en las casas mas cercanas. Con las dos bengalas restantes sacare a los bichos, al menos los suficientes como para que los que queden dentro puedan asesinarlos con cuchillo, ademas necesitare otro grupo que se encargue de poner las laminas de metal a los lados de la torre de vigilancia derrumbada para que los errantes no regresen─Explique realizando otro de mis planos mentales, si algún beneficio te traía haber estado tanto tiempo junto a Negan era el de aprender su forma de pensar a la hora de hacer un plan, sus muchas tácticas que utilizaba, algunas sin duda eran mas siniestras que otras pero al fin y al cabo funcionaban.

─No se... que hubiésemos hecho si tu no hubieses venido con Daryl─Dijo con dificultad inclinando su cuerpo hacia adelante y poniendo una mano en mi hombro. Aunque en el exterior permanecí seria por dentro rebozaba de la alegría, ahora todos harían lo que yo dijese incluido Rick.

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Holius!

Buenoop otro capitulo mas de Lucille <3.

Como siempre comenten y denle a la estrellita dorada 🌟 si les gusto el capi, eso me ayuda a continuar.

Besos y salu2!

Bennifel.