Día 690:

Narra Lucille.

La noche caía sobre Alexandria, de a poco el cielo iba tornándose de un color anaranjado que mas tarde se oscurecería por completo. Mientras permanecía sentada en la barandilla del porche la incredibilidad de estar allí aun abundaba en mis sentimientos aunque de a poco iba haciéndose mas y mas real. Aquella era la primera ves que estaba sola en todo el día, todos se habían encargado de reincorporarme aquí demasiado bien pero aun así sentía algo diferente, no había una falta ni una sobra, mas bien, era un extraño sentimiento que reflejaba un cambio. Tal ves era yo quien había cambiado durante aquellos meses y pronto comenzaría a creer que aquello era cierto. Tal ves todo había cambiado.

Suspire abatida y revolví mi cabello mientras observaba las personas caminar bajo los últimos rayos de luz, pocas, un numero reducido, las demás estaban metida en sus casas miedosas a que Negan pudiese encontrarlas, al parecer mi antiguo amo había comenzado a mostrar con ellos su lado mas descarado pero, y aun sabiendo que probablemente me castigaría por mi supuesta ''huida'', ya no le temía, jamas le había temido, ni jamas le temería. Pero al parecer Rick si.

-Lucille...- Llamo Carl desde la acera, aquello me tomo por sorpresa e hizo que me tambalee un mínimo del lugar en donde estaba sentada, pronto como me percate de que era el volví a relajarme. Sin duda hacia mucho no recordaba lo pacifico que era darse un baño con agua tibia.

Hice un movimiento con mi cabeza invitándolo a acercarse, el no lo dudo y subió lentamente un par de escalones hasta estar mas cerca de mi posición, pero aun así se mantenía alejado como si en realidad me temiese. Suspire de forma sonora para que ambos nos tranquilizásemos y pudiésemos entrar en confianza.

-Gracias Carl- Dije de forma tímida mientras miraba hacia otro sitio ya sin luz, aquello me recordó a mi en toda mi vida, jamas seria capaz de poder agradecer formalmente a alguien, tan orgullosa, tan tediosa que era incapaz de reconocer que alguien me había ayudado.

Pero siempre lo había reconocido.

-¿Por que?- Pregunto el extrañado mientras tomaba haciendo en el banquillo a un lado de aquel barandal donde yo me encontraba posicionada, gire mi cabeza, la cual estaba levemente apoyada contra la pared, hasta encontrar la mirada expectante de Carl en mi dirección.

-Has salido a buscarme, tu y Eustace- Reconocí honorablemente con nostalgia, apenas si había llegado y no había tenido tiempo para verle, seguramente se alegraría por la gran noticia que corría por los muros de la zona segura en cuanto estuviese aquí. Mas no podía entender como es que Carl y el rubio no se habían desollado en el camino sabiendo que tan diferentes eran y que su relación inestable consistía en lanzarse insultos y miradas tajantes. El castaño asintió algo tímido quitándose de la cabeza su sombrero de sheriff y jugando entre el con sus dedos. -Es... increíble ¿sabes? Tu y el... solían llevarse muy mal y...- Comencé a decir extasiada cuando fue su vos la que hablo.

-Lo se- Afirmo con una pequeña sonrisa entre sus labios, ya sin mirarme y aun jugueteando con su sombrero. -No es tan malo como creí- El elevo su cabeza para observar mi mueca sorprendida y atenta a lo que acababa de decir, sin duda, ya no creía que fuese la única diferente en aquella extraña aura.

-¿Carl Grimes aun eres tu?- Pregunte arrugando mi frente cuando el volvió a mirarme atentamente luego de ver sus dedos enredados entre hilos, mas luego soltó una carcajada bastante silenciosa.

-Esa la pregunta que me hago sobre ti desde que has regresado- Admitió el suspirando, pero notablemente entusiasmado. -Sonríes, ríes mas, ya no estas a la defensiva, es extraño- Admitió mientras se fijaba en mi con su ojo entrecerrado, aun podía notar su tono de voz alegre y animado.

-Cuando conoces a alguien que es igual a ti, te das cuenta de que ya no quieres seguir siendo esa horrible persona, y pues... es un asco tener que saber que has estado actuando mal por un largo tiempo, siendo alguien que no quieres ser y... saber que has perdido la esencia, una parte de ti de la que puedes aprender aun mas de la que has conservado contigo- Suspire cerrando un momento mis ojos mientras pronunciaba aquellas palabras con sabiduría, era extrañamente placentero poder explicar aquello sin dudar de algo en lo que crees, sin duda la verdad era aun mas desenvuelta.

-Creo que es hora de que me valla- Dijo el con un tono frío en sus labios mientras amagaba levantarse de su lugar, sin duda alguna no me esperaba aquella tajante reacción. Ladee mi cabeza y lance como dados al aire las que pensé serian mis ultimas palabras en aquella conversación pues el estaba dispuesto a marcharse ya.

-¿Te he incomodado no es así?-.

-No... es solo que...- El dudo unos segundos, sabia que una lucha dentro de si mismo estaba produciéndose en ese mismo momento hasta que volvió a hablar enfurecido. -Creo que... sin duda te has enamorado de Derek- Soltó el como si fuese la frase con mas déficit de pronunciación en el mundo. Me quede helada ante aquella agitada suposición.

-¿Que?-. Arrugue mi frente y mi tono de voz cambio dramáticamente, ya no era para nada pacifico.

-Le has besado en la boca, hace rato antes de despedirse- Dijo el asqueado mientras bajaba varios escalones de aquel porche, estaba huyendo mientras yo iba pegando saltos detrás de el con el único fin de poder detenerlo ¿Por que una sensación de vergüenza estaba invadiéndome ahora que el mencionaba aquello?.

-¿Y que? A ti también- Respondí con un chillido acusador, el se volteo inesperadamente y me observo con su único ojo entrecerrado fulminándome con el como si quisiera aplastar mi cabeza como a una uva.

-Eso no significo nada- Aclaro el mientras me cruzaba de brazos enfadada.

-Por supuesto que no- Reconocí dándole la razón como si no le hubiese dado importancia a aquel antiguo echo. Carl bipolar.

-Bien- Finalizo el pensando que tendría la ultima palabra mientras se alejaba.

-Bien- Pronuncie en tono alto mientras subía las escaleras del porche, el seguía avanzando rápidamente por la calle ahora desierta.

-Bien- Volvió a puntualizar el mientras se alejaba aun mas cuando ya se había volteado y no podía verme.

-Bien- Grite a todo pulmón y de un portazo entre a la casa devastada.

Toby me miraba echar humos medio adormilado en medio del camino mientras se frotaba los ojos, así mismo Daryl había salido del baño con el cepillo aun entre sus dientes y la espuma blanca resbalándose por su barbilla. Aaron y Eric no se habían quedado atrás, Aaron había levantado la vista de su gran lista para ponerme atención mientras que Eric se había asomado rápidamente por el hueco de la cocina a observar que había pasado o mas bien, quien casi había tumbado la puerta de entrada.

Unas manos se apoyaron en mis hombros detrás de mi, aun exaltada reacciones de la peor forma y me voltee lista para atacar con un golpe a puño cerrado aunque me quede en seco al ver su figura sonriente.

No hice mas que abrazar al pequeño Jesus quien ahora era prácticamente tan bajo como lo era yo. O yo era tan alta como lo era el.

______________________________________________________________________________

Heeeeeeey!

3/3 Espero que les haya gustado mucho la maratón y no olviden votar y comentar!!!!!!!!!

Muchas muchas gracias de veras a todas por los votos y comentarios, sois las mejores!!!!!

No olviden que mañana subiré cap. nuevo así que... ahí nos vimos!